El día ganado al asesino
La mañana
Una corriente de cuadrados
Que cuento en los techos
El mediodía
La colosal hora pérfida
Donde el frió te acalora
La tarde
Dónde las viejas
Se quiebran podridas
La noche
la hora en que la luna
me llama a entregarte el alma
=
=
La tarde
En que conoció la virtud
El asesino bañado en senectud
La noche
En que la coroné con
La pizarra de la poeta argentina
=
=
La mañana
En que una tromba
Se formó en el piso de mi cabeza.
El mediodía
Donde lo vivido
Fue importante tendida en la mesa.
La tarde
Donde lucho con el viento
Y con las lecturas de delinquir
La noche
En que sigo el camino verde
La senda de la muerte
La mañana en que
Pienso enajenarme
Un poco más
El mediodia
De los amantes
Que pasean desnudos
La tarde
De Boileau
Y los muertos
La noche
En que las naves negras
Partieron hacia la isla.
-esto-
La mañana que
Contuvo al
Mediodia
Que asesina
Cada tarde
Que culmina
Cada noche
- y esto-
En la mañana del día:
Deberá bañarse
Deberá pegar la estampa
Deberá abrigarse
Deberá afeitarse y limpiarse
Deberá luchar contra el calor del sol
Deberá disfrutar del celo
Deberá pelear en las casas de pisos blancos
Deberá en la mañana caminar y
Enajenarse de plata
Y deberá inundar
Deberá luchar plástico
Deberá amar
Deberá dar vueltas
Deberá intentar asesinar las piedras que regala pulirlas y
demacrarlas
Deberá hacerlo
Por eso
Por el eco lejano
-
-
Porque las sillas vacías persiguen
Cada mañana
Al que no duerme la noche
Y
Asiente:
El brillo diurno de la venganza.
El brillo del día oscurecido –asesinado-
El
brillo Feliz.
No hay comentarios:
Publicar un comentario